Gustavo Peirone llegó en el momento más difícil de la historia del club, se hizo cargo de un plantel que tenía como objetivo volver a la máxima categoría del básquet argentino. En una temporada logró el ascenso y en su primera Liga Nacional puso al equipo nuevamente en playoffs luego de ocho años.
Con la vara alta comenzó una nueva edición con un fixture complicado, seis partidos de visitante y uno de local donde logró salir airoso ganando tres de visitante y como local derrotando al último campeón Boca Juniors.
Con siete juegos por delante como local todo suponía que podía ser un buen momento para seguir escalando, pero cuatro derrotas seguidas complicaron el panorama. En busca de una solución, la directiva puso fin al vínculo con el entrenador. Junto a Peirone, también dejó su cargo el asistente técnico Gustavo Rossotto.
Agradecemos y siempre valoraremos el trabajo de ambos por los logros alcanzados, su respeto hacia la institución y deseamos éxitos en sus próximos pasos.
Mientras la dirigencia trabaja en la búsqueda de un reemplazante, el equipo quedará a cargo de Mario Milanesio, como entrenador interino, quien ya supo estar al frente del griego en cuatro oportunidades. En el 2001 como asistente, del 2003 al 2005 donde consiguió la Liga Sudamericana, en el 2006 al 2007 y su última etapa en el 2013. Actualmente está trabajando en la institución como encargado de las divisiones inferiores.
Informe y fotos: Prensa Atenas.
